Más de 100 desafíos se llevaron a cabo durante la última Semana I, realizada en las sedes de Santiago y Concepción, durante los días 5, 6 y 7 de octubre. La actividad tuvo como objetivo fortalecer el desarrollo de competencias genéricas, a través de la interdisciplina y el trabajo colaborativo.
El programa se realizó a partir de desafíos dirigidos a alumnos, los cuales fueron propuestos por docentes de la universidad, empresas o instituciones, en donde se buscaba fortalecer el desarrollo de competencias a través de la interdisciplina y colaboración. Este año, la Facultad de Ingeniería participó con diferentes desafíos en ambas sedes, donde algunos de los miembros de la Dirección de Innovación estuvieron a cargo de varios de ellos.
Desafíos Dirección de Innovación Ingeniería UDD
Macarena Troncoso, investigadora adjunta del Centro de Investigación en Tecnologías para la Sociedad (C+), llevó a cabo el desafío “¿Cómo enfrentar la basura en el Cajón del Maipo?”, que buscaba ayudar a las comunidades locales a identificar microbasurales, los posibles orígenes de los residuos en el lugar y cómo esto afecta a las personas que viven ahí. En este caso, los estudiantes pudieron conocer en detalle la situación actual en el Cajón del Maipo a través de informes y una salida a terreno, donde recolectaron basura que había en el sector.
“La idea fue que los estudiantes propusieran un plan de trabajo que fuera lo más real posible y en donde, además, involucran a actores principales y comunidades que son parte de la solución final y a los que les afecta directamente”, señaló Macarena, en relación a uno de los enfoques que tuvo el desafío.
Una de las actividades que se realizó también en este desafío y que tuvo la colaboración de Impacto UDD, fue la presentación del documental “Queremos Parque”, campaña que busca proteger el último territorio público en los valles de los ríos Colorado y Olivares en el Cajón del Maipo.
Por otra parte, Andrés Cepeda, investigador adjunto del C+, desarrolló el desafío “Biomateriales: ¿Reemplazar o repensar?”, el cual estuvo enfocado en estudiar y fabricar materiales basados en materias primas orgánicas y naturales.
“El desafío básico fue cuestionarnos cómo estamos relacionándonos con los materiales que ocupamos diariamente, ser conscientes de los problemas que producen el uso de ciertos polímeros o el consumo, después de esto se pasa a la propuesta en donde los alumnos pudieron aprender sobre diferentes metodologías y buscar posibles soluciones”, señaló Andrés, explicando cómo estas actividades se relacionan con la vida cotidiana de las personas.
De esta misma manera, el laboratorio de Tech Policy del C+, llevó a cabo el desafío «Visibiliza a los invisibles: Empatiza con los vulnerables», un taller multidisciplinario que combina contenidos y metodologías de psicología moral, filosofía, enfermería, salud pública, diseño multimedia de mapas narrativos (story maps) y design thinking para informar una App que permite georreferenciar encuestas y material visual de la gente en situación de calle.
“El gran valor de los residuos orgánicos”, a cargo de Sebastián Guzmán y “Micromovilidad: Más allá del scooter y la bici eléctrica”, guiado por Andrés Santelices fueron otros de los desafíos que se realizaron durante la Semana I en Santiago y que estuvieron a cargo por diferentes miembros del equipo de Innovación de Ingeniería con el objetivo de poder integrar la tecnología y entregar soluciones a diferentes problemáticas sociales y actuales.
Por su parte, en Concepción, se realizaron diferentes desafíos enfocados en la innovación y tecnología, los que se llevaron a cabo con una gran participación por parte de estudiantes y profesores.
Este es el caso del desafío “Makercamp: Enseñemos tecnología interactivamente”, el cual tuvo como objetivo diseñar un “museo interactivo” que facilite la comprensión de los fundamentos de la electrónica a estudiantes de enseñanza media o universitaria. Los estudiantes pudieron visitar en terreno el museo CICAT, lugar en el que pudieron aprender sobre cómo fomentar la retención de ciertos temas a través de contenidos más lúdicos.
Sebastián Adonay, tutor de Maker Campus e Investigador asistente del C+, sostuvo que “creo que se fortalecen mucho las ideas cuando se arman entre estudiantes de diferentes áreas, por lo tanto fue muy bueno ya que los resultados y soluciones sobre el tema dependían 100% de ellos mismos”.
Los invitamos a revisar las imágenes de la actividad: