Cristóbal Ortiz y Josefa Ulloa fueron parte del European Innovation Academy durante tres semanas trabajaron en un negocio, el cual fue presentado ante una comisión de destacados empresarios internacionales provenientes de compañías como Google, Ferrari y Fiat.
Los estudiantes de Ingeniería Civil Industrial, Cristóbal Ortiz y Josefa Ulloa, ambos de Concepción, participaron en la European Innovation Academy (EIA) que se llevó a cabo en la ciudad de Turín, Italia. Un programa destinado a jóvenes emprendedores provenientes de distintas partes del mundo y con diferentes profesiones. La finalidad de este curso era lograr desarrollar un negocio en tan solo 15 días.
El programa del EIA se dividía en dos partes. La primera, durante las mañanas, los alumnos asistían a charlas dictadas por expositores provenientes de empresas como Ferrari, Google, FIAT y de universidades como Stanford y Berkeley. La segunda mitad de la jornada, los asistentas debían desarrollar su idea. “Trabajábamos de tres a 8 con nuestro equipo. En mi equipo había otro chileno de la UDD, que estudiaba comercial, un finlandés, un estonio y un italiano. Algunos eran diseñadores, otros desarrolladores, era totalmente multidisciplinario” agrega Cristóbal.
Experiencias adquiridas
Ambos concuerdan que el curso es de gran intensidad, debido a la cantidad de trabajo que se debe hacer en poco tiempo, pese a esto lograron concretar los proyectos realizados con sus respectivos equipos. “Es muy intenso, a veces estresante y frustrante, pero con todo el apoyo que te da el equipo de EIA se puede lograr. Personalmente, a mí no me tocó un muy buen grupo, de hecho nuestra diseñadora se volvió a su país en la mitad del programa, justo cuando más la necesitábamos, pero al final logramos terminar la idea básica del negocio, gracias al apoyo del equipo”. Recuerda Josefa
Ortiz junto a sus compañeros lograron diseñar un negocio y continúan colaborando en un proyecto llamado “Shorcut”. La idea fue crear una plataforma de transporte y logística marítima, en donde tomaron el rol de intermediarios entre clientes y las navieras o shipownerz. La propuesta funcionó tan bien que fue seleccionada como unos de las tres ideas ganadoras del programa.