Cuando uno escucha el concepto de Transformación Digital inmediatamente se nos vienen a la mente computadores, máquinas y nos vemos como usuarios de la tecnología. Pero lo que suena como un mundo futurista, es algo que ya está pasando y que cambió la forma en que nos vinculamos con la tecnología y el mundo. El usuario actual es también productor y creador, y así lo podemos ver diariamente en los múltiples  emprendimientos que hoy están en las tiendas virtuales o cuando utilizamos aplicaciones y nos sorprendemos con un servicio personalizado.

Por otro lado, la tecnología está facilitando nuevas formas de interactuar entre nosotros.  Así, ella nos permite ir más allá de acciones individuales, y evolucionar a modelos donde las personas colaborativamente ofrecen soluciones a sus pares.   Uber, Waze y AirBnb son sólo algunos ejemplos de cómo empresas han innovado en sus modelos de negocios y ello genera a muchas industrias el mayor desafío: Transformarse o desaparecer.

La historia reciente nos ha mostrado que lo que diferencia a las empresas que están teniendo éxito y las que no, no es sólo  el avance tecnológico en sus producto, procesos o servicios, sino una nueva mirada a sus clientes, y las necesidades que ellos tienen.  Ello implica sobre todo un cambio cultural y mental de la organización, que es probablemente más difícil. Las tecnologías se presentan como el medio para mejorar la calidad de servicios, bajar costos y de manera inmediata mejorar la comunicación que se tiene con los clientes o usuarios.

Es por lo anterior que en el Centro de Transformación Digital UDD (CTD) de la Facultad de Ingeniería tenemos como misión aportar a las empresas a desarrollar y trabajar estas habilidades que permitan impulsar una efectiva transformación digital. Contamos un equipo docente de líderes de las principales empresas tecnológicas y académicos  quienes desde la experiencia buscan aportar y guiar a quienes estén dispuestos asumir este desafío.

Para el CTD la transformación digital exitosa es cuando no tenemos miedo al trabajo colaborativo ni tampoco a poner al cliente al centro  de nuestro modelo de negocios.  Es utilizar la Inteligencia Artificial para aumentar nuestra productividad, bajar costos y acercar a las personas soluciones personalizadas.  Termino recordando que en esta transformación el liderazgo es clave y ese rol no podemos delegarlo. Para unirse a la nueva era digital requerimos un liderazgo con convicción, que esté dispuesto a repensar las habilidades que debe desarrollar su organización, y que involucre la participación de sus equipos para enfrentar el desafío que se viene.

Fernando Rojas O.

Decano Ingeniería UDD